La procesión de Nuestro Padre Jesús de la Paz dio inicio a la Semana Santa de Baza. El año pasado la amenaza de lluvia impidió que la Borriquilla saliera a la calle y se tuvo que quedar en su Casa de Hermandad. Jesús de la Paz ha congregado a mucha gente a su paso por las calles y plazas bastetanas, en tarde primaveral con 29 grados a lo hora de la salida, desde el Barrio de San Juan.

La Real e Ilustre Cofradía de la Entrada Triunfal de Jesús de la Paz en Jerusalén, Santísimo Cristo del Amor y Nuestra Señora de la Esperanza y San Juan Evangelista, organizó el primer cortejo de la Semana Santa, con su sencillez habitual. En esta ocasión Jesús de la Paz, obra del escultor e imaginero sevillano Antonio Jesús Dubé Herdugo, lució una túnica blanca. En el mismo paso va otra imagen, al de San Juan Evangelista.

Esta vez el paso de Jesús de la Paz, no pudo realizar la Saludá a la Cofradía de Santiago, como sí lo hizo al Nazareno que se encontraba en su Casa de Hermandad en la Cava Alta.

Bajo la dirección de José Ramón Ibarra Mañas, el paso portado por dos cuadrillas, una de mujeres y otra de hombres fue poco a poco andando su recorrido con gran brillantez, si bien fue a su paso por tribuna y en las inmediaciones de su Casa de Hermandad, ya de regreso, cuando se vivieron los momentos más brillantes.

El acompañamiento musical estuvo a cargo de la Banda de Tambores y Cornetas Clavos de Cristo de la localidad almeriense de Berja.

José Utrera

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